La alcaldesa de Fuengirola, la in popular, Ana Mula, no esta para bromas. La alcaldesa contable nunca ha sido una lumbrera en cultura. Ni en cultura política, ni en la otra. De la política ya sabíamos que estaba muy en la onda. Haberse criado con las mayorías absolutas que heredo de su predecesora en el cargo Esperanza Oña tiene esas cosas. Ordeno y mando…
Insistimos la cultura política democrática no es lo suyo. Pero la otra cultura tampoco. Lo ha sufrido en sus carnes, el portavoz de oposición por CSSP, Pedro Pérez Blanes. El político y abogado andaluz intento en su turno de palabra recitar un poema a la alcaldesa. Le censuro. Y no es la primera vez. Pérez Blanes ya lleva tres expulsiones del pleno simplemente por hacer oposición. Otras dos expulsiones lleva su compañera de banquillo, Palmira Soto. Entre los dos han sido expulsados del Plano caso media docena de veces.Y es la Mula no le gusta que le lleven la contraria.
Pero no podíamos dejar el poema de Pedro Pérez Blanes sin publicar. Lo que no pudieron oír en el pleno se lo publicamos nosotros en estas páginas
Romance del Corrupto empoderado
Plana mayor de la Costa
en Fuengirola, brama;
por la casa podemita
en Madrid se le reclama.
Los seiscientos mil euros,
chalecito y jardín del ala,
con hipoteca a treinta años
por criar a sus hijos, casta.
Torpeza! Pardiez! de Pablo,
pues no vio venir la parca
que a la vuelta de la esquina,
con la daga lo esperaba.
Para publicar las fotos
de la última pulga alada,
del último rincón que habita
en su casa y morada.
Pero de ese otro antro,
de cuatrocientos noventa
y cinco metros, doscientos
y sesenta de vivienda,
mas doscientos treinta y ocho
de terraza, y otros cientos
de solarium, del ático
pepero, de la “Lezo”.
Guadalmina. Don Ignacio,
En Marbella, ¡qué casa!
Setecientos setenta mil
euros de ala, ¿Pasada?
Pagó a la Coast Investment
compartiendo en alma,
Testaferro, comida,
fiesta, Sobrino y cama.
De ese pelotazo curtido
en las bolsas embaladas
de basura en Cartagena
de las Indias las llaman.
Saqueo del Canal Isabel.
Libertad que bajo fianza,
disfruta en su otra casa
la del barrio de Aravaca.
Más de un millón de euros
pagó por mansión su casa,
hace doce años, ¿y hoy?
Vale dos y pico, ¡cómo amasa!
Tanto dio de sí el panal
de rica miel y empalago,
que de su hucha del canal
hizo acopio y gran estrago.
Pero eso ya no importa
pues ¡ay!, triste de Pablo,
mayor escándalo diste
con tu chalet hipotecado.
Ni chorizo, ni corrupto.
Ni de rico, ni forzado.
Sino fiero podemita,
enjuto y descuidado.
Ya no importa que se robe,
que un gobierno condenado,
por corrupto y embustero
a la ruina han llevado.
Votemos al chorizo,
elegante y desalmado,
que ya no es tiempo decente
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